La poda de árboles

¡HOLA! VECIN@S: soy Cecilia Cerisola y mi profesión es Ingeniera Agrónoma. Como la mayoría de ustedes saben, el correo del barrio lo manejamos entre 4 vecinos, procurando ocultar las direcciones de todos ustedes para preservarlas. Eso sí, cuando alguien escribe al correo del barrio se les reenvía a tod@s para que estén en conocimiento de opiniones, sugerencias, quejas y aportes que redunden en beneficio de nosotros, los vecinos, y el hermoso entorno en el que vivimos.

Hoy viernes santo entré al correo del barrio, confieso que más preocupada por la perra perdida de Michel y algún episodio de inseguridad que por la poda de los eucaliptus. Me encontré un correo, que les copio más abajo, enviado por una Ingeniera Agrónoma que se llama Cecilia (no soy yo), que además de tocaya es mi colega en la Facultad de Agronomía.

Hasta donde yo sé, la Ingeniera Cecilia Grimaldi no es vecina nuestra, pero ha accedido a nuestros intercambios y emite una valiosa opinión, como profesional preocupada por el medio ambiente y su preservación. La Ing. Grimaldi dirigió su correo al de nuestra Asamblea con copia a nuestro vecino Miguel, casi víctima de una rama desgajada espontáneamente a su paso. La respuesta de nuestro vecino también pueden leerla más abajo de este correo.

Para no redundar en lo que Miguel explica con claridad a la Ing. Grimaldi, desearía aportar algunos antecedentes. La Plaza y lo que actualmente constituye nuestro barrio, fue originalmente un monte de eucaliptus, parcelado y loteado por la inmobiliaria Kanmar. Se reservó una manzana como espacio verde y el resto de la superficie fue vendida como parcelas urbanas destinadas a viviendas unifamiliares.

Los eucaliptus presentes en esa manzana que ahora es La Plaza no forman parte de un arbolado urbano racional, sino de una antigua plantación rural. Su hábito de crecimiento lo convierte en una especie capaz de sobrevivir en condiciones de suelo marginales, incluso rebrotan después de incendios (su semilla también sobrevive al fuego) y llegan a alcanzar los 30 metros de altura.

En verano suele desprenderse de muchas de sus hojas, las cuales constituyen un riesgo de incendio incluso con un cigarrillo mal apagado. La tierra que ha sido poblada con eucaliptus queda esquilmada y limita el establecimiento y crecimiento de otras especies de mayor calidad, o de interés paisajístico urbano. Cuando se los poda "racionalmente" (ya sea de formación, mantenimiento, rejuvenecimiento o limpieza), se forma un plano de debilidad en la rama cortada que hace que el nuevo crecimiento resulte aún más peligroso que el original a la hora de desprenderse. Además, ¿quien se va a ocupar de esa "racionalidad"?.

La Municipalidad de La Plata a través de su Delegación solo acude cuando hay casi muertos o un árbol queda atravesado en la vía pública o se llevó puestos en su caída cables de electricidad o de teléfono. Otro pequeño aporte técnico es que Kanmar para pagar el loteo decapitó los suelos y vendió los primeros 30 cm de suelo fértil para hornos de ladrillos.

Por debajo hay un horizonte muy arcilloso de muy difícil penetración de las raíces, incluso las del eucaliptus, por eso se caen árboles enteros donde cualquiera de nosotros puede apreciar la falta de un sistema radicular pivotante que sostenga 25 o 30 metros de altura de estos árboles. Coincido con mi colega que para tener una armoniosa plaza urbana hay que reemplazar los actuales ejemplares de eucaliptus por plantas de mayor calidad y valor paisajístico, pero los vecinos no podemos ocuparnos de todo mientras la Comuna no solo no poda árboles sino que nos tiene sin cloacas, sin agua potable, sin calles, sin gas, sin señalización y sin transporte.

Bastante hacemos pagando de nuestro bolsillo una poda que aunque no sea la mejor, ni efectuada en la época correcta, va a evitar daños humanos y materiales. Quizá mi colega y yo podríamos proponer un Proyecto de Extensión Universitaria que estudiara el reemplazo de los árboles "no urbanos" por otros más idóneos para el arbolado urbano. Sin olvidarnos, como bien dice Miguel, la financiación de semejante empresa.

Los dejo con los dos correos que motivaron éste que les escribo.
Un abrazo,

Cecilia

CORREO ENVIADO POR LA INGENIERA AGRÓNOMA CECILIA GRIMALDI
Hola, me llamo Cecilia, soy Ing. Agrónoma y siempre me sorprende la importancia que la gente le otorga a la poda de los árboles. Año tras año observo impotente la mutilacion de los arboles de la ciudad que lleva a cabo la Municipalidad, árboles que han tardado décadas en crecer y que son patrimonio de todos los ciudadamos son brutal y despiadadamente mutilados y talados. Para instruirnos un poco, les cuento que existen diferentes tipos de podas: de formación, de mantenimiento, de rejuvenecimiento, de limpieza, etc. cada una con un objetivo específico a lograr.

La gran mayoría de estas prácticas se realiza con "tijeras de podar" y NUNCA con enormes sierras o motosierras. Por otra parte, es sumamente importante que la tarea sea realizada por personal idóneo y capacitado , de otra forma asistiremos al rápido deterioro de los ejemplares. La ciudad está llena de àrboles ahuecados, debilitados y enfermos producto de las" mal llamadas podas".

Acaso no sería mejor plantar árboles para el futuro nuestro y de nuestras generaciones en lugar de mutilar los que están en pie? Por último y para ir terminando, es regla de oro que JAMÁS se poda en los meses que tienen "r" ya que las plantas se encuntran en actividad, es decir, no han entrado en reposo y el daño es mayor ....Espero que este correo sirva de algo y quedo a su disposición para lo que necesiten

CORREO DE RESPUESTA DE NUESTRO VECINO MIGUEL
Estimada Cecilia:
Las ideas y opiniones son siempre bienvenidas.
Tal vez no estés al tanto de que los elevados ecaliptus que perimetran la Plaza La Emilia han sido derribados en reiteradas oportunidades por las tormentas, y que cada vez han causado daños diversos, que no incluyeron personas lastimadas solo de pura y afortunada casualidad; que destruyeron parte de la modesta casa de unos vecinos la última vez (de milagro en ese momento no había nadie en esa parte de la casa partida por el árbol); y que cada tanto, sin viento ni tormenta, suele caerse alguna rama de gran porte de buenas a primeras, a veces en momentos en que niños y vecinos en general disfrutamos de la plaza.

La actual poda se está haciendo con autorización e intervención de la Delagación Municipal y de Espacios Verdes de la Comuna, y después de años de consensuar la idea con muchos vecinos, entre los que se cuentan también profesionales en ingeniería forestal, entre otros.

Si tenés una propuesta concreta y precisa para implementar el replantado de otras especies y el paulatino reemplazo de los eucaliptus -modo de financiación incluido-, por supuesto será bienvenida, compartida y dialogada con todos los vecinos de la lista de correo de la "Asamblea La Emilia".
Cordialmente,
Miguel

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ASAMBLEA VECINAL "LA EMILIA"