Cartelera destruída + El "in"
Con el prefijo "in" se está indicando que algo "no existe", que "algo falta", o que "se carece de algo", entonces:
¿Cómo pasar sin escalas de ser un pelotudo importante a un “IN” ?, o sea: indeseable, insolidario, indiferente, incorregible, inculto, inútil o incapaz, inaceptable, inadaptado, indecente, individualista, infeliz y profundamente ingrato. Así se comportaron los dos vecinos que destruyeron la cartelera con el mapa del barrio. Por complicidad o por la acción directa fueron los responsables de destruir lo que no ayudaron a construir. Ninguno de los dos participa en nada, pero su individualismo exacerbado hasta la impudicia, les hizo creer que tenían el derecho a enrabietarse y destruir lo que era de tod@s.
Como recordaran por un mail anterior, el viernes 24 de abril el vecino Mauro Garaventta (135 entre 473 y 474) le alquiló para una “recibida” (o sea, un futuro profesional) la quinta situada en 473 entre 135 y 136 bis a “Fito” Fraga (135 y 473). Para orientar a los invitados “alguien” colocó un horrible cartel con flecha indicadora tapando toda la cartelera que estaba en La Plaza. Dañar lo que es “público” es un delito. No se puede ocultar, ni destruir señales de tránsito, ni carteles indicadores, ni nada que es de todos para beneficio particular, aunque más no sea para avisar de un cumpleaños o una “recibida”. Sobran árboles y postes para ese cometido (y después habría que removerlos). Una vecina que regresaba a su casa, actuando con interés comunitario y no individual, retiró el papel que ocultaba la cartelera y lo colocó entre dos postes. El sábado 25 a la mañana la cartelera de los vecinos había desaparecido (los indeseables actúan a escondidas). Myriam, la vecina que desplazó la “flecha indicadora” fue entonces a hablar con Fito, dueño de la quinta alquilada. Por él conoció que el “inquilino” había sido Mauro Garaventta, pero no pudo localizarlo en toda la semana para comentarle que “posiblemente alguien” de la “recibida” pudiera haber cometido el daño. Una semana después, y mientras los vecinos nos encontrábamos reunidos en La Plaza, una vecina informó que la cartelera se encontraba tirada en un baldío situado frente a la quinta de Fito y detrás de la casa de Mauro. La fuimos a buscar y comprobamos la saña con que había sido destruida. En ese mismo momento nos encontramos con Fito quien “por todo argumento” dijo que no “se metía en peleas de vecinos”. En realidad no se mete en nada que beneficie a los vecinos, pero como tampoco había habido ninguna pelea no le entendimos su frase célebre. En cuanto a Mauro Garaventta todavía no tuvimos la oportunidad ni el gusto de escuchar su versión.
A modo de chiste ilustrativo va como archivo un cartel que colocó un tano en su casa
Posted by Asamblea La Emilia
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